"Mi Marido No es Sexual"

Preguntándome en uno de mis seminarios por la web, Melanie escribre: “Mi marido es muy amoroso, pero no muy sexual. He intentado hablar con él sobre este tema muchas vees de maneras no amenazantes, pero su falta de entusiasmo hacia el sexo hace que a mi me sea muy dificil involucrarme cuando finalmente parece que él se siente sexual. Tenemos cero intimidad a nivel mental y muy poca a nivel físico”.

A menudo escuchamos a hombres que se quejan de que sus mujeres no son sexuales. Puede sorprenderte que a menudo  también escuche esta queja de las mujeres.

Por mi experiencia, hay cierto número de razones por las que un hombre puede que no sea sexual en su relación:

• Puede que tenga un nivel de testosterona bajo. Esto es algo que se puede medir y hay medicación para subir el nivel de testosterona.

• Puede tener miedo a ser absorbido en lo que respecta al sexo. Si tuvo una madre incestuosa a nivel emocional y/o sexual, puede que esté aterrorizado a ser asfixiado.

• Puede que esté resistiéndose a ser controlado por su mujer. Si su mujer es crítica o exigente, puede que se cierre a nivel sexual para evitar ser controlado por ella. 

• Su mujer puede ser una persona  necesitada  y puede que él sienta que ella tira de él para sentirse bien consigo misma. Al igual que una mujer se siente utilizada cuando su marido utiliza el sexo de forma adictiva para sentirse bien consigo mismo, un hombre también puede sentirse utilizado cuando su mujer utiliza el sexo para sentirse digna de amor.

• Puede que haya aprendido a evitar tanto el rechazo como el ser absorbido siendo sexual por su cuenta, utilizando la pornografía como una forma segura de ser sexual sin tener que activar sus miedos.

• Puede que su sexualidad esté conectada a la intimidad emocional, y puede que no sienta esa intimidad emocional con su mujer.

• Puede haber un problema de control en la relacion en lo respecta al sexo.

• Puede que el sexo no sea algo importante para él.

• Puede que él sea impotente debido a alguna de las razones arriba expuestas.

Melanie afirma que su marido es muy amoroso, pero que tienen cero intimidad. Tanto para los hombres como para las mujeres en relaciones duraderas, el sexo puede convertirse en algo aburrido cuando no hay intimidad emocional. Lo primero que yo haría si tuviera que trabajar con Melanie sería explorar por qué no hay intimidad emocional, y si alguna de las causas arriba mencionadas puede estar contribuyendo al problema.

Melanie también afirma que cuando finalmente su marido se siente interesado por el sexo, a ella le cuesta mucho implicarse. A mi esto me indica que puede haber entre ellos un tema de control muy sutil:  ella quiere sexo cuando él no está disponible, pero cuando él está disponible, ella se aleja. A veces, tener el control sobre  tener relaciones sexuales es más importante para una de las dos partes incluso que tenerlas.  

También le preguntaría a Melanie sobre si ella sabía esto antes de casarse con su marido. La gente a menudo sabe estas cosas sobre su pareja, pero se auto-convencen de que no pasa nada, o de que pueden cambiarlo. Yo siempre animo a la gente a que acepten completamente las cosas tal cual son antes de casarse, ya que nunca hay  garantía de que las cosas vayan a cambiar. Una cosa es segura: no podemos cambiar a nadie. Las personas cambian si ellas quieren, pero nosotros no podemos hacer que cambien. Si alguien no es muy sexual antes de casarse, es poco probable que esto cambie.

Sabiendo esto, exploraría con Melanie qué es lo que  sabía ella antes de casarse. Como atraemos a nuestra pareja por el mismo nivel de heridas, puede que haya una parte de Melanie que esté bien con la falta de sexulidad, pero puede que se esté tomando la falta de sexualidad de su marido como algo personal, que es por lo que ella está teniendo un problema con el tema.

La sexualidad es a veces un barómetro de lo que está ocurriendo en  la relación, y como no hay intimidad emocional entre Melanie y su marido, es probable que esta sea al menos una de las causas de sus problemas sexuales.

Cualquiera que sea la razón, siempre hay mucho que aprender si ambos están abiertos a aprender.